¿Qué clase de energía
transmites?
Si tú llevaras imanes
pegados por todas partes, podrías esperar que algunas cosas se te pegaran, que
otras se alejaran corriendo de tu lado y que otras no te afectaran.
En cierto
modo, esto es lo que ocurre en la vida. Inconscientemente transmites tu energía.
Algunas de tus cualidades son magnéticas y otras repelentes. Has atraído hacia
ti toda cosa y persona que está en tu vida. La vibración que emites está
formada por tu energía consciente e inconsciente, en parte repelente, en parte
magnética, y en parte neutra. La ley que hay detrás de ello es la que dice:
atraemos lo que es similar a nosotros.
Atraemos a nuestra vida,
personas y situaciones que tienen vibraciones similares a las nuestras. Las
cualidades negativas como la penuria, la desesperación, la depresión, la rudeza
o la desconsideración conducen a una frecuencia baja. Si poseemos alguno de
estos elementos en nuestra naturaleza, magnetizaremos a alguien de energía
similar hacia nuestra vida. Las cualidades como el amor, la gentileza, la
dicha, el deleite o la generosidad transmiten una energía de frecuencia elevada
y también magnetizan a personas de energía similar. El universo nos ofrece
espejos para que nos contemplemos en ellos, mira a tu alrededor y observa a los
personajes que te rodean. Están interpretando un papel en la obra de tu vida
por algún motivo. Cuanto más vehementemente negamos que somos como imanes para
cierto tipo de persona o situación, más nos pide nuestro Yo superior que
observemos atentamente a nuestra sombra. La desesperación es algo que repele.
Cuando alguien está desesperado por tener pareja, los demás captan esa
desesperación a un nivel sutil y se retiran. Cuando cambian esa energía por
otra amorosa, abierta y de aceptación, atraen a la persona adecuada. La ley de
atracción funciona en diferentes ámbitos. Si no estás en armonía con la vida
puedes atraer alimentos que te sientan mal. Si tienes pensamientos autocríticos
te estás atacando a ti mismo. Puedes atraer a mosquitos que te piquen. Están
sirviendo de espejo para la energía que estás emitiendo. Si estás soterrando la
cólera puedes atraer un ataque. Si tienes pensamientos negativos atraes a
personas y situaciones negativas. Si tienes mala salud, en el momento en que
estés listo para soltarla atraerás al sanador perfecto a tu vida. Si quieres
que un proyecto tenga éxito pero tienes sentimientos ocultos de aburrimiento, o
si estás asustado o cansado, la energía subyacente contrarrestará el éxito del
proyecto. Siempre que algo no se manifieste como tú esperas, examina tus sentimientos
soterrados y cámbialos. Entonces magnetiza aquello que quieres.
Lo interior atrae a lo
exterior. Si algo de tu mundo exterior no es como quieres que sea, busca dentro
y cambia tu manera de sentir con respecto a ti mismo. Entonces automáticamente
atraerás a personas y experiencias diferentes hacia ti. Si te infravaloras y
piensas que no eres lo suficientemente bueno, atraerás a una persona abusiva
que te hará lo mismo.
Recuérdate tus buenas
cualidades y magnetiza a alguien que te aprecie. No emitas energía negativa ni
pienses en atraer algún desastre hacia ti. Irradia luz positiva y confía en que
un milagro se acerque a ti.
Eres como un imán: atraes
aquello que es similar a ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario