Finalmente, la Tierra está
rodeada por una atmósfera variable, que pasa de la serenidad a la violencia de
los fenómenos climáticos, como el viento, la lluvia y las tempestades. Es
sabido, por ejemplo, que una tormenta eléctrica es un verdadero festival de
energías desatadas, que poseen una fuerza excepcional. Por que no vamos a
aprovecharlas?
Usar las vibraciones de
los fenómenos meteorológicos es una de las sabidurías más remotas de la
brujería, y forma también parte de lo que podemos llamar magia planetaria,
0 sea, la que se relaciona con la vida, los movimientos y los acontecimientos
de nuestro planeta.
Esta magia planetaria puede utilizarse para fines concretos,
pero es básicamente una magia: que proporciona energías preventivas. Es decir, que carga nuestro ser de vibraciones positivas
para defenderlo de todos los ataques del Mal, en cualquiera de sus formas y
artimañas.
Aprenderemos que rituales
y sortilegios podemos utilizar para recibir las mejores vibraciones en cada
fecha del año u hora del día, en cada fase de la luna, cada ámbito natural y
situación climática. Con eso estaremos preparados y fortalecidos para sacar
mejor provecho de nuestra mágica energía interior.
El primer paso para trabajar con el clima es entenderlo.
Para lograrlo debes
examinarlo detenidamente. No te fijes sólo en si llueve o no, tienes que tratar
de discernir qué dirección y fuerza lleva el viento e incluso observar qué
forma adoptan las nubes. Utiliza también el resto de tus sentidos; a menudo te
darás cuenta de que, antes de ponerse a llover, la tierra huele a humedad o que
el aroma del aire es diferente antes de nevar, etc. Fíjate en otros indicadores:
los animales y los niños pequeños suelen comportarse de una manera distinta
cuando el clima va a cambiar.
Si vives en el campo verás
que el ganado tiende a apiñarse cuando va a hacer más frío. Los niños, de
hecho, están más irascibles e inquietos antes de las tormentas (de esto podrá
dar fe cualquier padre o profesor). Práctica mirando al cielo y a las demás
señales de manera regular y posiblemente llegará un momento en el que los cambios
de clima no te cogerán desprevenida.
Cuando ya estés en sintonía
con la meteorología y con las características de las distintas estaciones,
puedes intentar practicar la magia del cambio cuando realmente te haga falta.
Por ejemplo:
Cuando el cielo está cubierto de nubes, este tiempo es útil
porque filtran las vibraciones negativas y pueden ser muy favorables en asuntos
personales. Favorecen las relaciones sentimentales y preservan la unidad de la
pareja y la familia, así como la seguridad del hogar. Protegen también las
tareas artesanas y manuales y la salud de la piel y el cabello, a veces con
efecto rejuvenecedor.
Ayuda mucho a exteriorizar los sentimientos de forma
privada y sacarlos, más aun cuando hay
lluvia, con una meditación nos podemos mimetizar con ella y sacar de adentro lo
que nos duele, lo que nos bloquea, lo que nos hiere.
Como dice una hermosa canción: Hay que sacarlo todo afuera
para que llegue la primavera.
Descargar la mochila que llevamos.
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